CRÓNICAS DE MOVIMIENTO OBRERO
CAPÍTULO III
LA GRAN REVOLUCIÓN
FRANCESA REVOLUCIÓN FRANCESA

En parís se
constituyo el régimen de corporativo. La corporación profesional lucho contra
el poderío feudal en un afán de autonomía y a su vez lucho contra los demás
cuerpos profesionales, con el propósito de destruir al competidor. El señor
feudal, hasta entonces servido en el orden profesional, por un régimen de
esclavitud o servidumbre, encontró reñida oposición de la corporación en su
fase ascendente de afirmación política y social.

Todos los
historiadores ha consagrado páginas elocuentísimas de los históricos sucesos de
la gran revolución francesa, para describir a grandes rasgos tan gloriosa
jornada tomo parte de la versión del gran maestro Pedro kropotkine de su obra
“la gran revolución, que dice lo siguiente:
Por
mil canales indirectos se habían filtrado los grandes principios de libertad y emancipación
hasta los suburbios de la grandes ciudades, desaparecieron al respecto la
monarquía y la aristocracia. Las ideas igualitarias penetraban en los medios
más obscuros; resplandores de rebeldía iluminaban las inteligencias y la
esperanza de un cambio próximo hacia latir con frecuencia los corazones más
humildes.


El pueblo gemía bajo peso de los impuestos
extraídos por el Estado, de los censos pagados al señor, de los diezmos
percibidos por el clero y de los trabajos personales impuestos por los tres.
Poblaciones enteras estaban reducidas a la
mendicidad y recorrían los caminos en número de quinientos mil. En pueblos y
aldeas el hambre había pasado al estado crónico; reaparecía a cortos intervalos
y diezmaba provincias enteras.
Así, comenzó la revolución. El pueblo alcanzaba su primera victoria.
Necesitaba una victoria material, como esta, de ese género. Era necesario que
la revolución sostuviera una lucha y que de ella salieran triunfantes; que el
pueblo probara su fuerza para imponerse a sus enemigos, que despertara las
energías en Francia e impulsara en todas partes a la rebeldía.
¡Esta gloriosa jornada que es asombro de la historia,
consagrada a parís y lo inmortaliza como la cuna donde nació la libertad para
todo el universo!
El pueblo de parís quiere realizar la emancipación de
los trabajadores.
Dentro de estas
crónicas encontramos significado de algunas palabras que en el diccionario
tradicional nos da diferente significado, PROLETARIADO: Por proletariado se
entiende al hombre que no dispone de de
más medios de vida que la venta de su fuerza de trabajo, originalmente en su
forma latina “PROLETARIUS” no significa enteramente lo mismo. En la roma
antigua, proletario era el que no tenia mas fortuna que su descendencia, sus
vástagos, la prole.

La existencia de
una clase oprimida es esencial en esta sociedad basada en antagonismos de
clase. Emancipar a la clase oprimida equivale por consiguiente, a crear una
sociedad. Más para que la clase oprimida pueda emanciparse, es menester que las
fuerzas de la producción y las relaciones sociales vigentes dejen de ser incompatibles
entre sí. La condición esencial de la emancipación de la clase obrera consiste precisamente
en la desaparición de todas las clases sociales.
Agrupados los
obreros en las mutualidades, se habituaron a discutir solución de sus intereses
comunes, llegando por lógica a concentrándose para luchar unidos cuando sus
condiciones de vida se hacían duras. Después del vapor surgió el auge de la
energía eléctrica y en 1837 MORSE sorprendió al mundo con el telégrafo. El
triunfo del maquinismo originó la decadencia del artesano y la burguesía
industrial y comercial se hizo más vigorosa y la obra de esta revolución
económica provoco la escisión entre la burguesía y el proletariado, pues la
maquina había transformado. Los artesanos convertidos en masa proletaria con una concepción cada
vez más definida, acosada por los bajos salarios, por el hambre y la miseria,
se fueron a la acción y vinieron las protestas, las huelgas y la destrucción de
las maquinarias, en reacción de la voracidad de la burguesía.
El cooperativismo,
el proletariado lo ensaya con la esperanza de encontrar el sistema de lucha más
adecuado para lograr las metas de sus aspiraciones, por desgracia, las
consecuencias son idénticas al resultado del mutualismo. En el lapso
comprendido de 1848 a 1851 el proletariado toma conciencia de que su
emancipación, solamente la podrá conseguir con su propio esfuerzo y se entabla
la lucha que arroja como resultado una serie de huelgas continuadas en las
diversas ramas de la industria que marcha en auge. La represión de la burguesía
y del estado, coludidos en la defensa de los intereses creados, abre procesos
en contra de los primeros luchadores obreros, en el lapsos mencionado, se
principia con 65 procesos en 1848 y en 1851 llega el número a 160 con 1,182
trabajadores acusados y encarcelados.
En octubre de 1879
tuvo verificativo el congreso de MARCELLA, en esta reunión el panorama de la
cuestión social del momento, se afinaron las metas y se discutió la táctica o
sistema de lucha a seguir; como resultado el cooperativismo fue repudiado como
inerme, tras un debate apasionado SURGIO EL SINDICATO como organismo de clase
para defensa de los derechos de la clase trabajadora.


El 28 de septiembre
de 1864 en Saint Martin´s Hall, con delirante entusiasmo de la multitud
proletaria ahí congregada, se declaró constituida: “LA ASOCIACION INTERNACIONAL DE
LOS TRABAJAODRES”.
PREAMBULO DE LOS ESTATUTOS DE
LA ASOCIACION INTERNACIONAL
DE LOS TRABAJADORES.
Que la emancipación
de los trabajadores debe ser obra de los trabajadores mismos;
Que los esfuerzos
de los trabajadores para conquistar su emancipación no han de entender a
constituir privilegios nuevos, si no a establecer para todos los mismos
derechos y los mismos deberes.
Que por lo mismo la
emancipación económica de los trabajadores es el gran objeto a que debe
subordinarse todo movimiento político;
Que los esfuerzos
hechos hasta ahora han fracasado por falta de solidaridad entre los obreros de
las diferentes profesiones en cada país, y de unión fraternal entre los
trabajadores de las diversas regiones.
Que la emancipación
de los trabajadores no es un problema únicamente local o nacional, sino que, al
contrario, este problema interesa a todas las naciones civilizadas, estando
necesariamente subordinada su solución al curso teórico y práctico de las
mismas.
Que el movimiento
que se está efectuando entre los obreros de los países más industriales del
mundo entero, al engendrar nuevas esperanzas, da un solemne aviso para no
incurrir en antiguos errores, y aconsejar cambiar todos los esfuerzos hasta
ahora aislados.
Geronimo Noel González Álvarez.